
La fotógrafa en La Chanca
http://www.teleprensa.es 01.03.2014
DALÍAS.- El domingo 2 de marzo, a las 17:00 horas, se presentó en el Casino de Dalías la exposición “Otras miradas” de la fotógrafa granadina Gracia Gámez, en la que se muestran instantáneas hechas a mujeres en India, Nicaragua y Vietnam. Estas fotografías acaban de ser expuestas por el Instituto Andaluz de la Mujer, de la Junta de Andalucía, en Granada.
Esta exposición, que se podrá visitar durante todos los días de la semana durante el mes de marzo, ha sido organizada por la Asociación de Mujeres Dalayat, junto al Casino de Dalías, como uno de las actividades con las que en este mes celebran el día internacional de la mujer. Además, Dalayat ha preparado una cena conmemorativa para el día 8, para el día 9 una charla-coloquio con Lola Gómez Ferrón, empresaria distinguida con la Medalla de Andalucía, y en el Casino se dedica a finales de mes una tertulia literaria en la que participarán mujeres escritoras.
Gracia Gámez se formó como fotógrafa en Granada y Barcelona y ha presentado exposiciones individuales en estas dos ciudades en los últimos 20 años. Una característica principal que caracteriza a sus fotografías resulta en el hecho de trabajar en series que podríamos definir como antropológicas, como su colección “Las planchadoras”, o su serie “Lavaderos”. En la fotografía de Gracia Gámez es importante la humanidad, el retrato sin posado de las actividades habituales de las personas en los lugares que visita, la conciencia social que descubre a las personas en su humanidad y sus formas de vida.
Gracia Gámez no retrata la impostura ni el artificio al que nos aboca la cotidiana máscara que nos imponemos para cumplir los ritos sociales. Por eso huye del espanto de la pose, de la sonrisa forzada, de la enferma estampa del ego que se abanica y se enfebrece. La mente limpia procura mirada clara y abre el arroyo de la alegría a que cada vivencia se empape de la pasión por vivir.
Gracia Gámez retrata esa alegría de compartir la vida en lugares comunes, en los actos humildes, en la excitación cotidiana, y maravillosa, de un simple paseo, de ir al mercado, estableciendo un fraternal triángulo entre su mirar fotográfico, la inocente mirada que retrata y los ojos que se deleitan en la foto, ya traspasados en la fruta dorada de las relaciones humanas.
La humanidad es, precisamente, el tema central de estas fotos y de muchas otras de Gracia Gámez. El corazón central de este planeta late en nuestra dimensión humana y lo encuentra Ismael Diadié, el sabio, cuando se emociona, ciudad tras ciudad, con la riqueza espiritual de las personas y no con la historia conducida de los edificios. Por esa humanidad también clama Lola Poveda, en su presencia de sabina milenaria, ahondando sus raíces en el éter complejo de la creación de los mundos.
Así, Gracia Gámez, la fotógrafa, se diluye en Gracia, la mujer que vive, que ama y sonríe y se entrega al misterio tal como plantéo Suzuki Masajo en el siguente haiku:
Una estrella fugaz
para una mujer
que no sabe qué pedir.
Gracia, ya colectividad, se zambulle en la esencia de todas las mujeres, tejiendo las ramas imperiosas de pasión en el árbol que nutre la vida. Y se hace mujer toda, fluye en las cadencias, en las ondas de esa agua que refleja al ser humano en su intensidad plena y resplandeciente sin importar lugar o país, ahí donde no importa la individualidad y sí el preciado devenir del río de la vida.